
El rey visigodo Alarico ya sabéis que fue famoso por saquear Roma en el año 410 DC. Roma en aquel entonces ya no era la capital del Imperio. Honorio la había trasladado a Rávena en el 402 DC por su dificultad para posibles asedios e invasiones.
Pues a qué no sabíais que Alarico dictó una norma por la cual, todo caballero que se cortara los cabellos, perdería su condición de noble.
Parecía ser costumbre entre los caballeros de aquello época tener el pelo largo. Era signo, al parecer, de una cierta posición social.
Siglos después, del Cid también se comentaba que nunca se cortó la barba por sus victorias en el campo de batalla. La barba o los cabellos intactos de ambas tradiciones tan similares (visigodos y castellanos) detonaban un status social y valores muy importantes en la edad media como respeto, honor, lealtad, etc.